Escrito por
Éxodo 99 (mayo-jun.´09)
– Autor: Varios Autores –
La Comunidad de Santo Tomás de Aquino de Madrid es una comunidad integrada en la Iglesia de Base de Madrid. Sus orígenes hay que buscarlos en la Parroquia Universitaria Santo Tomás de Aquino que hace más de 25 años fue cerrada por el arzobispado de Madrid por la incomodidad que le causaba su mensaje y su organización democrática y no basada en la jerarquización impuesta desde arriba.
No es éste el lugar de relatar nuestra historia, pero sí es conveniente enmarcar a nuestra comunidad para aquellos que no tengan noticias de ella.
Cada año esta comunidad celebra dos asambleas: una de carácter más reflexivo y otra más organizativa. En la primera de ellas hace dos años se trataron temas relacionados con el Jesús histórico y la fe. El interés que suscitó el tratamiento que se hizo del tema hizo que la Comisión de Fe y Cultura de la Comunidad en su informe anual a la asamblea organizativa propusiera ahondar en este tema. La asamblea fue un paso más allá y encargó a la comisión la organización de un ciclo de conferencias con el tema “El Jesús Histórico y el Cristo de la Fe”, conferencias que se acompañarían de una reflexión y un trabajo por grupos de manera que el formato fuese más el de conferencia-taller. Para ello se pediría a los ponentes un texto base del desarrollo de la ponencia y bibliografía de consulta.
El trabajo de la comisión, que contó con la inestimable colaboración de Evaristo Villar, cristalizó en la organización de un ciclo de seis conferencias que se refleja en el siguiente cuadro:
_ JESÚS ¿HIJO DE DIOS? Aproximaciones a la encarnación, Manuel Fraijo. _ LA VIDA Y EL MENSAJE DE JESÚS, Xabier Pikaza. _ JESÚS DE NAZARET Y SU ACCESO A LA REALIDAD A TRAVÉS DE LOS SENTIDOS. “Tocar y gustar” como Jesús, Pepa Torres. _ ¿EN QUÉ CREÍA JESÚS? ¿Cómo creer en Jesús?, Fernando Rivas. _ LA CRUZ. Marcos nuevos para interpretaciones nuevas, Mercedes Navarro. _ REPENSAR LA RESURRECCIÓN, Andrés Torres Queiruga.
La valoración que se hizo del ciclo fue muy buena. La asistencia fue muy satisfactoria, tanto de miembros de la comunidad como de personas de otras comunidades. Todas las charlas tuvieron como colofón animados diálogos.
Como es natural, cada ponente enfocó el tema desde su perspectiva. No siempre fue la esperada por el auditorio, incluso a veces resultó sorprendente, pero la satisfacción general se demostró por los comentarios de los asistentes al ciclo. La petición de muchos de los asistentes de que se continuase durante el curso siguiente fue sancionada en la asamblea de la comunidad con el encargo a la comisión de organizar un nuevo ciclo complementario. Se hizo la salvedad, no obstante, de incidir en el aspecto “taller” para lo que en el segundo ciclo se pidió con mayor anticipación la documentación a los ponentes y la comunidad trató los temas en sus grupos de reflexión con la ayuda del enfoque y la bibliografía propuestos. Las reflexiones y preguntas que salieron de estos grupos se enviaron a los ponentes para que enfocaran sus charlas sobre las inquietudes plasmadas.
Este segundo ciclo, con asistencia algo menor que el primero, pero también satisfactoria contó con el siguiente programa:
_ CÓMO LEER HOY LOS EVANGELIOS. Aproximación desde los métodos histórico-críticos, Evaristo Villar. _ LOS MILAGROS DE JESÚS. Signos del Reino, Elisa Estévez. _ LA ÚLTIMA CENA DE JESÚS. Despedida, anticipación y presencia, Senén Vidal. _ LA CRUZ DE JESÚS. Ética del dolor y fuente de vida, José I. González Faus.
Debido a que el ciclo ha finalizado inmediatamente antes de escribir esta reseña no se ha hecho una valoración del mismo aunque podemos anticipar que ha satisfecho a los asistentes por los comentarios recogidos.
En la vida de la comunidad la formación y los espacios de reflexión que han supuesto estos ciclos han de contribuir al mejor conocimiento del mensaje de Jesús y a su interpretación a la luz de los estudios más modernos, ya que este tema ha experimentado un importante avance desde mediados del siglo pasado y, por tanto, no está aún incardinado en el acervo de la mayoría de los cristianos. Creemos que una comunidad como la nuestra debe avanzar cada día más en un cristianismo comprometido pero también crítico, alejarse de presupuestos manidos y asentados durante siglos que han recubierto el mensaje y la figura de Jesús de Nazaret de muchos tópicos, de muchas capas que dificultan ver la esencia de su persona y de su propuesta a la humanidad y han hecho perder de vista que lo importante de ella no es tanto el culto como la aproximación a los necesitados, a su dolor y a sus necesidades y el compromiso de acercar el Reino con nuestra acción en el mundo.