Escrito por
III Foro Social Mundial de Madrid
Manifiesto de la Asamblea de Movimientos (27 de abril de 2010)
Millones de personas de todo el mundo celebran a lo largo de 2010 la décima edición del Foro Social Mundial (FSM) con un objetivo común: buscar alternativas al modelo de sociedad que ha llevado a la crisis. Un capitalismo neoliberal que en aras del beneficio explota la fuerza de trabajo, manipula las conciencias y destruye el medio ambiente; una cultura patriarcal y autoritaria, que jerarquiza las relaciones sociales según diferencias de clase, sexo y etnia; y una política dominada por los mercados financieros, que ahonda las desigualdades Norte-Sur y mantiene costosos ejércitos y cuerpos policiales al servicio del orden establecido.
En Madrid el III FSM ha contado con la participación de unas 3.000 personas y 140 colectivos, lo que ha doblado el nivel de asistencia de años anteriores. En 78 talleres y 7 espacios de encuentro hemos mantenido intensos debates que han dado lugar a consensos y propuestas de acción para los próximos meses.
El presente manifiesto ha sido elaborado colectivamente y ratificado por la Asamblea de Movimientos del FSM de Madrid cuyos ejes de actuación son la horizontalidad, el intercambio de ideas y el apoyo a procesos y formas de vida alternativos al sistema dominante (más información en www.fsmmadrid.org; contactos en comunicacion@fsmmadrid.org).
Superar la crisis exige cambiar el modelo de sociedad
Las medidas anticrisis adoptadas en España, en coincidencia con las del G-20, el FMI y la Comisión Europea, se están orientando a reactivar las finanzas y el modelo de producción y consumo anteriores a la crisis. La banca y las grandes empresas, que acumularon en años pasados enormes beneficios, han socializado ahora sus pérdidas y el gobierno hace recaer sobre la población trabajadora la mayor parte de los costes: reforma laboral y de las pensiones, más impuestos indirectos que no discriminan en función de la renta, etc. Se trata de recuperar la rentabilidad del capital, a la vez que se disciplina a la clase trabajadora y se da una vuelta de tuerca a la desigualdad social y a la privatización de los servicios públicos.
Las personas y los movimientos participantes en el Foro entendemos que, para abordar la crisis, hay que incidir en las causas que la han provocado. Causas que ponen en cuestión el modelo social en su conjunto, ya que la crisis viene de atrás y es global: de valores, política, económica, alimentaria y ecológica.
El drama del paro, con sus secuelas de pobreza, embargos y problemas familiares de todo tipo, es el exponente más claro de un modelo neoliberal que en tiempos de bonanza congeló los salarios y mantuvo la temporalidad por encima del 30% y ahora, al llegar la crisis, deja en la calle a 4,6 millones de personas. Una situación especialmente grave para la juventud cuyo horizonte laboral es cada vez más sombrío (40% en el paro). Los talleres y asambleas de paradas y parados reunidos en el Foro reclaman un sindicalismo combativo y exigen:
– Políticas sociales y de vivienda más eficaces, incluida una renta básica universal que erradique la pobreza y los programas asistencialistas.
– Avanzar en la creación de una economía y unas finanzas socializadas, que tengan como principal soporte la gestión cooperativa de la producción, la comercialización y el consumo, con la mira puesta en satisfacer las necesidades reales de la población, respetando el medio ambiente, la biodiversidad y la soberanía alimentaria, y teniendo en cuenta los límites de un planeta sobreexplotado. Las redes cooperativas de economía solidaria son una muestra de que esto es posible, lo mismo que la banca ética o las experiencias de autogestión de vivienda.
La crisis afecta específicamente a las mujeres, víctimas a la vez del capitalismo y del patriarcado, al acentuar los conflictos sociales y la violencia machista, así como su invisibilización, estereotipos y marginación social. Sobre las mujeres recae la mayor parte del trabajo de cuidados, que ocupa más horas que todo el empleo remunerado junto y produce la mano de obra necesaria para la acumulación económica, además de ser la base principal de la manutención y la convivencia afectiva y sexual de las personas. Siguiendo la estela del encuentro de Granada en 2009, la lucha feminista reclama una organización de cuidados que implique igualmente a hombres y mujeres, y donde la atención a la dependencia cuente con servicios públicos eficientes. El acceso a la educación sexual, la anticoncepción de emergencia y el aborto en el sistema nacional de salud son también reivindicaciones básicas, así como la despatologización de la transexualidad y el paso al régimen general de las empleadas de hogar.
La crisis ha agudizado la explotación laboral y la segregación social de la inmigración: mayor paro, temporalidad y empleo sumergido, embargos de sus viviendas, redadas en la calle… La xenofobia de la política migratoria muestra la opresión de los pueblos y culturas del Sur y se manifiesta en una mayor restricción de derechos, el reforzamiento de la idea de “preferencia nacional” en el mercado de trabajo, la ampliación del tiempo de estancia en los CIES, la represión del apoyo y el hipercontrol de las fronteras. Desde el Foro llamamos a resolver estos problemas, en el marco de exigir una ciudadanía planetaria y una economía mundial orientada a asegurar el bienestar y la cooperación entre los pueblos. En particular pedimos la eliminación de las legislaciones especiales para la población inmigrante, un observatorio para recoger y denunciar los atropellos policiales y una mayor implicación en las brigadas vecinales de observación de derechos humanos.
La movilización es necesaria. Hacia la contracumbre UE-ALC
Muchos debates del Foro han girado en torno a cómo aunar a quienes no se resignan a aceptar este mundo tal como está, en un horizonte de justicia social y económica, valoración de la diversidad cultural, respeto y cuidado de la madre tierra e igualdad de derechos para todas las personas del planeta. Algunos de esos debates han quedado inconclusos, sobre todo al tratar de concretar las mediaciones políticas para esa transformación, pero sí hay consenso al definir algunos de sus ejes: trabajo horizontal desde la base, conexión con los sectores más oprimidos por el sistema y necesidad de converger a partir de nuestras diferencias.
La ciudadanía de Madrid se encuentra atrapada por un modelo de especulación que destruye la ciudad como espacio común. Una ciudad global neoliberal, a la que oponemos otro Madrid posible que se construya a partir de los vínculos y capacidad de acción de las y los de abajo. Entre otras iniciativas, el Foro apuesta por un modo de vida menos consumista, la defensa de los servicios públicos (educación, sanidad, vivienda, etc.) y la creación de una Plataforma por otro Madrid, que combine reflexión y acción, y cuya primera actuación sea impulsar una auditoría olímpica. También se decidió promover unas jornadas sobre cambio climático en el mes de marzo y contra los transgénicos en abril (ya realizadas).
Como capital de turno de la Unión Europea durante el primer semestre de 2010, Madrid es punto de encuentro donde se van a decidir importantes medidas sobre políticas de inmigración, servicios públicos y comercio internacional que pueden ser decisivas para las relaciones de Europa con el resto del mundo (en especial, los tratados “de libre comercio”).
La Asamblea de movimientos del FSM de Madrid ha decidido por unanimidad concentrar sus esfuerzos en apoyar la Contracumbre Enlazando Alternativas IV, que tendrá lugar en Madrid entre el 14 y el 18 de mayo de 2010, en el marco de la cumbre de jefes de Estado de Europa y América Latina. Nuestro objetivo es hacer frente a un nuevo “consenso de Bruselas” similar al “consenso de Washington”, que ha sido responsable durante décadas del empobrecimiento de los pueblos del Sur y que al interior de Europa puede dar lugar a políticas de ajuste brutal, como ya ocurre en Grecia, con menos derechos, más precariedad laboral y menos políticas sociales, al servicio del capital transnacional y las élites dominantes.
_ ¡Contra la Europa del capital y su respuesta a la crisis! _ ¡Otro mundo es posible, otra economía también!
